martes, noviembre 29

Satán es un buen hombre

No le temas a Satán

ni a su reinado.

Ya que él, al ser siempre malo

es bueno para ti,

porque sabrías a lo que te enfrentas

y puedes alejarte.


Témele a los lobos vestidos de oveja

que pululan en la tierra,

a los que te ofrecen una mano

y te acuchillan por la espalda,

los que se autodenominan amigos

y son capaces de venderte al mejor postor.


No le temas a lo que no estás seguro si existe,

tenle miedo a tu especie,

que es palpable y puedes ver,

la que es buena y mala a la vez.

jueves, noviembre 24

Tus besos

Tus besos no saben a caramelo,

sino que a vida y emoción

y lo que dice la canción

se queda corto al imaginar la pasión

cuando entregas lo mejor de tu interior.

martes, noviembre 22

Leyes de mercado

Mujer de armas tomar

demostrado por tu savia lingüística

que resulto ser pura fantasía

cuentos y mitos.


Vete, vende tu alma al diablo,

a ese bien penca

que te hace casarte

por miedo a quedarte sola,

el que te dará seguridad para la vejez

y cuantas cosas más.

¿Te hace eso realmente feliz

vieja revolucionaria?

Borges, Kafka y de Rokha

se avergonzarían de ti lolita…


Lo siento, no espero.

Que disfrutes el no disfrutar

de los espasmos orgásmicos

de las uvas.

sábado, noviembre 12

Recuerdos de noviembre

Sólo viví dos fechas,

y hoy siendo la tercera,

recuerdo los momentos

intensos que vivimos.


Podría escribir más

pero, ¿Para qué?

Tú y yo sabemos

lo que fuimos.


miércoles, noviembre 9

Noviembre nueve

Cuando naciste, Chile

buscaba el cambio social.

Cerca de tu primera década,

aquello fue frenado de sopetón.

La Historia y la tuya siguieron

el curso inexorable e imparable.

Hubo para todos tiempos difíciles

y momentos hermosos.

Formaste familia,

cayó el Muro de Berlín

y como siempre un montón

de acontecimientos pasaron.

Plantaste un árbol, eres padres y escribes

¿Qué mejor?


Hoy –aunque poco te importe-

Chile sigue buscando el cambio social,

y yo te agradezco

por criarme, amarme

y sobretodas las cosas

por ser el hombre que eres.